viviendo de dos

Conocí la maldición de tu pasión y el deleite de sus labios, me trepe en el árbol de tu cintura y conocí el paraíso de su amor, aprendí a vivir en tu piel y a probar de su sabor.

Te enredaste en mi cuerpo como una serpiente mientras él me hizo vivir de repente, el se sumerge en mi vientre pretendiendo vivir tu eres el deleite de mi sufrir.

Tú conoces mi senda porque contigo no tengo pudor, pero de su dulce canto escucho el latir de mi corazón, que se acelera por tu pasión esto es solo de dos.

Ya no sé que es peor estar con él deseándote a ti o estar contigo deseando vivir...dulcemente cruel es mi sentir